Imagínate un país con la sanidad descentralizada a las regiones. Imagínate un país en el que el 40% del gasto del presupuesto del gobierno regional sea gasto sanitario. Imagínate un país en el que el crecimiento del gasto sanitario sea superior al crecimiento del PIB en los últimos 15 años. Imagínate un país en el que la deuda pública de las regiones sea muy elevada en proporción a la deuda nacional. Después de leer esto seguro que pensarías que este país es España, pues no, este país es Canadá.